Aquí está la primera cabecera!!!
Hasta próxima versión. Hay muchas relaciones extrañas entre estos personajes. Iré haciendo capturas para que no sea solo texto. Por el momento he ido poniendo "parches" de lo que tenía por el ordena, pero ahora me las curraré más XD
También había pensado ir haciendo una presentación de cada uno de los personajes, así será más fácil seguir el hilo de este espacio.
Espero que os distraigan por un rato nuestras historias ^^
Por si alguien tiene dudas, Crónicas de Minahonda esta formado por dos Rogues, éstos son los principales causantes de toda esta movida de personajes. Menos mal que suelen pasar desapercibidos... ¬¬U
Creo que hay alguien husmeando en tu caja fuerte.
XD
lunes, 19 de septiembre de 2011
domingo, 18 de septiembre de 2011
Atrapa al pingüino
Entre el bullicio del Valle de la Fuerza se ve a un elfo dando brincos y riendo a carcajadas perseguido por un trol, que no llega a alcanzarle.
-Cuando te pille¡h veráhs. Te voi haser vudúuu..
- Jajajaja... No me cogerás, eres muy lento para El Gran Kokoronai!
Gulnar se para agotado. Mientras recupera el aliento, Kitoku que ha visto parte de la escena le pregunta:
-¿Qué pasa con ese elfo?
- No tieneh otha cosa que haser que molestar al prójimo. Taba io hablando con la banquera cuandoh me tranformó en pingüino y no podía controlarmeh.
-¿Y siempre hace esas cosas?
-No he la primerah vez. Pero le voy a haser una capa de cuero pa'que no pueda moverse tanto. jejeje
![]() |
Captura de hace un tiempo, que estlilo.. jajaja |
Mientras tanto, en la calle Mayor.
Kokoronai va dirección a la casa de inscripción cuando ve caer un orco en paracaídas, el fijarse se da cuenta de que es Märgoz.
- Jejeje... otra víctima...
Gulnar y Kitoku ven como aterriza Märgoz, Gulnar ha visto a Koko en la parte de arriba y hace señas a Märgoz. Éste un poco extrañado mira, y ve como un elfo de pelo oscuro acompañado de un elemental de agua y un girasol está casteando un hechizo.
- KOKORONAI!!!! -es el grito de Märgoz al reconocerlo, el suelo tiembla por el estruendo del grito, el resto de habitantes dejan sus tareas para ver que pasa.
Y justo en el momento exacto algo atrae a Koko hacia el suelo.
Queda aturdido y desorientado. Cuando abre los ojos, ve unas botas de placas, y según va levantando la mirada ve a un orco muy grande que le mira enfadado desde arriba. Pero no es el único, a su alrededor están el enorme tauren y el alto trol.
- Märgoz, cuanto tiempo. Pero esto no es forma de recibir a los amigos.- dice mientras se incorpora, sacudiendo el polvo de su ropa.
- Pues a ver si te aplicas el cuento. La próxima vez te pondré las cadenas, mago.
- Sabes que puedo atacarte igualmente. - contesta un poco molesto.
- Jajaja! No eres el único que tiene trucos, pequeñajo. Y no molestes más. Ves a recoges flores, y podrías ser un poco mas considerado con tus mayores.
- Ya empezamos... -empieza a ladear la cabeza y subir los hombros cuando de repente... todo se oscurece a su alrededor, y queda inmovilizado por algo que le aplasta hacia el suelo. Oye de lejos como los tres empiezan una conversación que se va alejando de él ignorando su llamada de socorro.
Märgoz - ¿Cómo te va Gulnar? Veo que ya os conocéis.
- Pueh la vedad es que no noh hemos presentao.- contesta Gulnar levantando los hombros. - Pero encantao y grasias por la ayudah.
- No es nada.- dice rascándose el tauren - Yo soy Kitoku, amigo de Märgoz, y por cierto, gracias por el equipo.
Kodanda llega sobre volando Orgrimar y ve a un grupo peculiar andando hacia el Valle de la Sabiduría, tras ellos un bulto se remueve en medio de la calle. "Alguien se ha olvidado la caza del día... bueno". Pero mientras Koko lucha por deshacerse de ese peso, Charquito y el girasol juegan en un lago cercano con los sapos y las serpientes. Al ver al duo comprende que es la "caza". " Seguro que se lo tiene merecido... " y se echa la mano a la cabeza " q paciencia..."
domingo, 11 de septiembre de 2011
Kokoronai - lvl 40
-Jajajajaja!!! Ya soy 40, y mi pochuelo corre que se las pela, ahora verán esos humanos de m...
- Koko!!
Kokoronai se gira y ve a Kodanda plantada detrás suyo, parece muy enfadada. Pero hace como si no le tuviera miedo, tiene una dignidad que mantener ante cualquier ser del mundo, sea quien sea.
- ¿Has visto como he crecido? Pronto estaré con vosotros (más bien por encima de vosotros, y me obedeceréis jojojo), luchando por la Horda y por nuestra raza.
- Ya veo que te lo estas tomando en serio, me gusta ver que haces algo a parte de fanfarronear. ¿Te va bien la capa que te mandé?
- Bueno... si si... La verdad es que es lo mejor que tengo...gracias...
- Aish... No se que hacer contigo, eres un caso. He oído que te metes en problemas cada dos por tres, eres muy temerario o un insensato... prefiero no saberlo. De ahora en adelante las cosas no serán tan fáciles, espero que empieces a hacer uso de la cabeza.
- No tienes de que preocuparte, ya sabes que soy el mejor. - todo orgulloso por estar por delante de su compañero Záck, un guerrero.
Koda se echa una mano a la cabeza y niega haber oído eso. - En fin... Ten cuidado, ¿vale?
Kokoronai asiente y se despide. Koda se queda mirando como se alejan Koko, su girasol cantarín y su elemental, al cual ha bautizado con el nombre de Charquito.
Pescando los primeros pargos del verano
Ya hace un tiempo que Kodanda anda de un lado para otro de Azeroth, desde que era pequeña siempre ha ido con su hermano Bifur, quien le ha enseñado todo le que sabe del oficio de pícaro, aunque a veces no lo parezca... en esos momentos Bifur le daría de collejas, pero Koda siempre se las apaña para escaquearse de las broncas. En el fondo se quieren mucho aunque Koda no sepa decírselo en palabras. En los momentos clave siempre acaba soltando una tontería, pero al menos hace reír a su hermano.
Durante una temporada ha estado haciendo trabajos con Salahem, su hermana. Ésta es bruja, y siempre va acompañada de un demonio. Koda ha ido tanto tiempo con alguien al lado que le cuesta ir sola, así que procura ir con alguna de sus mascotas para no sentirse sola en un mundo donde acecha el peligro alla donde vayas. Por suerte siempre hay algunos asentamientos, campamentos y ciudades donde poder descansar y sentirse medianamente seguro. Ese es uno de los motivos para no ir solo, la seguridad de uno mismo y de los que te rodean, aunque en un mundo donde la guerra esta al orden del día, no se puede fiar uno de estar a salvo en ningún lugar, sino que se lo pregunten a Gamon.
Después del último gran acontecimiento que asoló a Azeroth han cambiado algunas cosas. Los hermanos Alvein han pasado una larga temporada separados, cada uno por su lado y hace poco se han vuelto a encontrar en Orgrimar, que actualmente es la ciudad donde están los principales portales. Bifur se ha sacado novia, Salahem sigue con sus demonios y Kodanda ha pasado un tiempo con Margoz, que ha logrado que retome la pesca. Ahora Margoz está lejos de misiones, pero le ha prometido a Kodanda que cuando vuelva será mas fuerte y no tendra de que avergonzarse. Por su lado Koda le ha dicho muchas veces que no se avergüenza de el, y que para demostrárselo pescaria todos los pargos que fueran necesarios. Así que cada día se pone un rato a pescar.
Kodanda ha notado cambios en sus hermanos, en especial en Salahem, antes la sentía diferente ahora tiene un aura oscura que en ocasiones le da escalofríos, pero un así es su hermana pequeña. Con Bifur todo sigue más o menos igual, llevándola de un lado a otro, enseñándole nuevas técnicas y lugares, y preparándola para tareas de alto nivel. Pero a veces la deja con Keilah, su novia, no es mala persona pero tampoco la siente como una amiga del alma, es más bien una amiga de aventuras. Tampoco la conoce de hace mucho, así que no puede juzgarla, de echo no la conoce prácticamente. Se porta bien con Koda, más de una vez le ha salvado la vida con sus curas, que realmente, sino fuera por esa habilidad ella también lo pasaría bastante mal. No lucha mal, pero recibe que da gusto.
Días antes de que Margoz partiera a tierras lejanas, quedaron para ir a pescar, un día en el campo. En realidad no se alejaron mucho de Orgrimar pero al ser una zona poco frecuentada nadie les molestó. Margoz le enseñó como poner bien el cebo y como se hace un buen lanzamiento.
- Me da mal rollo lanzar el anzuelo desde detrás mío.
- Para lanza el anzuelo lejos has de hacerlo con seguridad y firmeza, no tengas miedo del anzuelo. Si lo haces bien no tienes porque engancharte, porque pasa por encima tuyo dibujando un arco.
Koda asiente y prueba siguiendo sus instrucciones. El anzuelo vuela, y cae tristemente en frente suyo, cerca de la orilla. Margoz no puede evitar reírse a carcajada limpia al ver la cara que se le queda a Kodanda.
- ¡No te rías de mi! -
Cuando se enfada se le inflan los mofletes y se pone roja. A Margoz le cuesta articular palabras pero al final logra parar y coger aire.
- A ver... ¿cómo puedo explicártelo para que lo entiendas?...
- He hecho lo que me has dicho...
- Si, lo he visto, pero te falta energía (Koda mira su barra)XD
Después de unos minutos dándole vueltas mientras observaba como lo volvía a intentar tuvo una idea.
- ¡Ya lo se! Usa la misma técnica que utilizas para lanzar los cuchillos. Pero no sueltes la caña...- y le saca la lengua, a lo que Kodanda también se la saca y acto seguido se concentra. Y logra hacer un buen lanzamiento, Margoz se queda anonadado, nunca había visto su lanzamiento de cuchillos, sabía de él porque hace poco logró un buen equipo en una mazmorra.
Pasaron toda la mañana pescando, a la hora de comer Kodanda dio muestra de sus dotes de cocina, que no son tan buenas como las de su hermano pero tampoco se le da mal del todo. Cocinó algunos de los peces y le guardaron unos Pargos a Bifur. Después de la comida reposaron un poco a la sombra de unas palmeras y luego Kodanda estuvo practicando un poco. Margoz no cogió la espada, por esa zona no era necesaria, pero Kodanda como lleva dagas no se separa de ellas ni para dormir, aunque esté en Orgrimar.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)